Días de locura

Se alborotan y deciden ese fin de semana tomar un avión a otra ciudad, con un clima diferente, con amigos incondicionalmente dispuestos a compartir su tiempo y con todas las ganas de pasárselo bien. Sin saber donde llegaran se embarcan en otro viaje más juntas, ya perdieron la cuenta de sus días de locura y lo siguen haciendo. Tomaron el avión y allá las están esperando sus amigos, la una toma el explorer blanco y la otra el aveo gris (en el pasado ya fue un peligro en el blanquito). Tienen una dirección y las llaves de un departamento al que nunca han ido, llegan y se deslumbran al ver la sorpresa que las esperaba. La obsesionada con lo muebles se quedó con la boca abierta, aún no podía creer que en el "departamentito" hubieran tantas salas, con tantos muebles de los que le gustan, ya eso había valido el viaje y no quería salir de ahí, era su clima, el ambiente perfecto para encender un cigarrillo, sentarse en la mecedora que estaba junto a la ventana y leer, sólo leer, pero no se podía, primero porque ya llevaba casi dos meses sin fumar y otra porque la estaban esperando afuera. Se alistó rápido, se puso sus lentes, se cambió de blusa y de aretes, se retocó el maquillaje y se embarcó para ir directo a la zona. Entraron a Strawberry Fields y le gustó su decoración, los Beatles armonizaban todo el lugar y la luz de las velas lo hacía bastante cálido a pesar del frío, de la música ni hablar, le recordaba a su querido Samoa.

Pasaron un buen rato conversando, bebiendo el noble contenido de la botella verde que en su ciudad se toma casi congelada pero que allá apenas se refrigera, hasta que las amigas farreras empezaron a llamar, la farra ya estaba prendida en 21 y extrañaban a la loquita que habla demás. Fue al baño una vez y le llamó la atención su decoración, se quedó con la frase de Kiss me quick!! y no aguantó las ganas de tomarse una foto (muy normal en ella). Se alistó a caminar por la zona llena de gente hasta llegar el auto y poder llegar al Twentis!!! Su compañero decidió no quedarse porque no le gustan mucho las multitudes.



Entró y el cambio de clima la golpeó de entrada, afuera hacía tanto frío que cuando entró a la disco casi se queda ahí tiesa por el calor que sintió. La música estaba increíble y solo se distinguían cuerpos saltando y contorsionandose de un lado al otro. Bebió, bailó, cantó y se la gozó al máximo. Por la ley de regulación de horarios para discos tuvieron que salir casi a las 4 de la mañana, con un hambre atroz y todas las ganas de seguir farreando se fueron a los hotdogs y luego a comprar Paisa cereza y Zhumir Sandia, tragos de nenas! ja de nenas bien borrachas ja ja. Next destination: la piscina temperada de uno de sus amigos, escuchando música y bebiendo les dieron las 6 de la mañana y en el departamento se veía como amanecía Quito.


Casi no durmió, tiene la maldita costumbre de levantarse temprano incluso después de amanecerse y a las 9:30 ya estaba en pie dando vueltas en el dormitorio tratando de levantar al resto. Salió y se topó con el amiguito de buen gusto dueño del depar, quien hasta les preparó el desayuno, claro después de haberlas criticado por las caritas y los alientos. Como si el no hiciera lo mismo ;)
Con toda la pereza del mundo se bañaron, se vistieron, se maquillaron, se arreglaron y salieron a almorzar, pero o era el alcohol en sus bocas o la comida estuvo muy mala, regresaron al depar a tratar de dormir y descansar para su siguiente noche. No lo consiguieron, ella peor, prefirió tomar el libro que su amigo había estado leyendo y se sentó a degustar "El cuerpo de una mujer desnuda", un libro escrito del punto de vista de la zoología, interesante y que con mayor tiempo hubiera terminado. Hasta que se aburrió y les exigió a las demás levantarse e irse a la Plaza Foch para un café. Ninguna se imaginó lo que pasaría luego.

No se decidían si entrar al CoffeeTree de siempre con sus mocaccinos soñados, Azuca con su decoración bonita o al local ese que tanto le gustaba que por $10 podrían beber todo el vino que quisieran, dieron una vuelta y pasaron por La Nuit, la Suca dijo este es el bar de mi primo y la comida es excelente. Pero no fue por eso que se quedaron, una sonrisa las cautivó y les dijo cuales eran las promociones de la noche. Dos por uno en mojitos cubanos, vodka tonic y botella de vino, voilá dijo las palabras clave "botellas de vino"... y se quedaron, conversaron de todo, de lo bueno, de lo malo, de lo molestoso, de lo olvidado, de lo bien que todo se sentía ahora, de los labios que quisieran besar, de aquellos de los que no se dejan. De las frustraciones superadas, de las adicciones curadas, de los nuevos planes, de la belleza, del amor y de la amistad.

Entre cada conversación y visita de esa sonrisa deslumbrante, hacían mofa del puerquito de la noche y cada vez era más seguido, era inevitable hacer que se sonroje y nos muestre a sus anchas esa sonrisa tan cautivante al principio estaba un poco reacio pero después solito venía, hasta que se dieron cuenta de que un anillo ocupaba su dedo anular y ella que no tiene pelos en la lengua le preguntó si era casado (después de todo ella sigue manteniendo sus valores y con un hombre casado jamas se juega). La respuesta fue no, pero fue una respuesta corta porque había más historia detrás de eso que solo el final de la noche pudo contar.

Después de comer y beber vino y Kalimochos empezó la rumba, debían encontrarse con sus amigos pero prefirieron mejor tener una ladies night. Y bailaron con Cubanito 1 y Cubanito 2, con el relacionista público (que por cierto las dejó muy marcadas, desde hacía tanto tiempo no habían bailado así de bien con un hombre). Llegaron las 4 de la mañana y la bendita ley otra vez hacía de las suyas. El hambre las mataba, era casi casi desesperante, en el departamentito no había nada y por ahí todo estaba cerrado y entonces cubanito 2 ofreció pan y queso crema en su depar, fue todo tan raro, nadie quería molestar pero realmente querían ir. Y así fue como llegaron a Buenos Aires (coincidencias). Entraron muertas de frío y se dieron cuenta de la realidad de cubanito 2. Y conversaron y les contaron verdades de sus antiguas realidades en el país al que no quieren regresar, no podían imaginarse que las bocas de los cubanitos se llenen de palabras como hambre, miseria, desesperación, impotencia. Al final algo les quedó muy claro, La Libertad No Tiene Precio. Ellos estaban dispuestos a pagarlo todo. Nos dieron clases de humildad, de inteligencia, de respeto, de afecto, de sacrificio, de amor y de protección, aparte de sonrisas deslumbrantes, abrazos de despedida inolvidables.

Llegaron un poco antes que la noche anterior al departamento, se llevaron un gran susto con la puerta de uno de los dormitorios, descansaron y al día siguiente la misma rutina en la mañana, por la tarde fueron nuevamente a la plaza Foch, esta vez si por el cafecito en Coffee Tree y una chica las abordó con esta pregunta: Cual es el sueño de sus vidas? Ummmm en coro fue: Ser felices! Pero eso no es un sueño, esa es una consecuencia, cual es su verdadero sueño? En su cabeza Alice Sophie sonó, pero se acordó de que ya había renunciado a ella, fue entonces cuando descubrió que su sueño era bastante simple, visitar dos lugares especiales, al Taj Mahal en la India, y París.

Tomaron su café, conversaron un rato, hablaron de los cubanitos y luego se les acercó la misma chica con rosas amarillas a cada una y una frase..."Decidete hoy a cumplir tus sueños"... Siempre ha estado segura de que tiene una conexión directa con Dios, y estas experiencias son su forma de hacerle llegar su mensaje. Siempre está agradecida por todo eso, por la amistad, por la fortaleza, por la inteligencia, por el amor propio, por los lugares y por pintar en ella todos los días una sonrisa.



Sus días de locura, no son más que demostraciones de que ser feliz es más fácil de lo que se piensa, tan sólo se tiene que entrecerrar un poco los ojos y mirar al cielo y luego todo al alrededor cambia de color y se pinta de fiesta ;)