Días monótonos

Falta aún contar mis historias de mi viaje a Perú, ya me daré el tiempo para aquello, pero ahora necesito desahogarme un poco. Desde que regresé todos mis días se volvieron monótonos y no es porque tenga la misma rutina, es porque simplemente el dolor es el denominador común. A mi llegada el enterarme del secuestro y asesinato de seres queridos fue una pésima bienvenida, aún me estremezco del dolor al pensar en lo que sufrieron, imagino su desesperación, adivino su miedo y sus ganas de complacer a los secuestradores en lo que pidieran con tal de mantenerse con vida. Hace poco leí "Asesino accidental" y mientras leía la última parte del libro (la del secuestro del protagonista, que de hecho era un Marine entrenado para este tipo de situaciones), pensaba mucho en ellos, pensaba en lo deshumanizados que pueden ser los secuestradores y dados los hechos sé que mis familiares sufrieron demasiado. A veces intento descifrar cómo una persona puede contener tanta maldad, odio, frustración y salvajismo dentro, hasta ahora no obtengo esa respuesta.

Después de esta pesadilla, recibí el golpe de decepción más grande que pueda haber sentido hasta ahora. El saber que confío en alguien y que a esa persona le vale un cuerno si me dice la verdad o no, que me engaña, que se confabula con otra, no sé, es simplemente desolador y la novela aún no acaba. Tanto di, tanto me esforcé por enmendar mis errores pasados, tanto trate de despojarme de mis miles demonios, y de nada sirvió. Volvieron los días de desesperación, en los que el corazón no para de latir, en los que mis ojos se cierran pero no descansan. Sentí nuevamente la falta de aire, la presión infinita en el pecho, sí, ya se sueno exagerada, pero es así.

Me obligo a empezar alegre mi día, escucho mis canciones, sí, esas mismas "las que me dan alegría", pero no siempre lo consigo, la mayoría de las veces me recuerdan a ti, cuando me mirabas con esa cara llena de escepticismo, tratando de descifrar que era lo que me llenaba de optimismo y maldita sea! por qué nunca te diste cuenta de que eras tú?!!!! Tú eras ese motor incansable que le daba luz a mis días, que calmaba mis nervios, que aliviaba mi cansancio y ahuyentaba mis temores. Estoy consciente de que no se puede obligar a nadie a querer a nadie, por eso te dejé ir sin chistar, sin molestar, ni fastidiar a nadie. Al marcharte si cometí un error, de una o cierta forma siento que te herí con mis mensajes, no me lo has dicho, pero lo siento así y sabes, de alguna forma por fin habías conseguido que reaccionara, decías que querías que te odié, hasta ahora he podido hacerlo, pero aquel día reaccioné ante tu osadía y te escribí todo eso.

Luego un día en mi país deciden hacer un paro los policías y damos el peor espectáculo al mundo entero. Nos mostramos como un pueblo sin valores, en los que al mínimo descuido la gente se aprovecha y saquea locales comerciales, los militares se embarcan en una batalla campal con los policías y el títere de presidente que tenemos sale después de un pseudo secuestro como héroe celebrando que sigue al poder.

Mis días siguen monótonos, llenos de cansancio, de dolor, de desesperanza, de decepción por todo, decepción de la mayoría de personas que me rodean y a veces me pregunto si vale la pena seguir así.

Alix